En el marco del proceso de aislamiento social, preventivo y obligatorio por COVID-19 nos encontramos respetando y apoyando las medidas propuestas por el estado provincial desde el 18 de marzo y luego por el nacional. Siendo la comunidad artística la primera en suspender sus actividades nos motiva generar este contacto para a través de él informar el estado en el que se encuentra la comunidad artística.
Hoy en emergencia sanitaria cultural, si bien entendemos que esto no se trata de una situación reciente, sino más bien años de falta de apoyo y respuestas a los sucesivos reclamos que evidencian la precariedad laboral que nuestro sector atraviesa.
Un análisis real y profundo de la realidad artística en los últimos tiempos, nos deja el siguiente panorama:
- Familias sin sus fuentes principales de trabajo.
- Profesores – talleristas – facilitadores limitados para ejercer su oficio.
- Artistas circenses sin poder trabajar en auto circo, plazas y semáforos.
- Salas de teatro independientes, centros culturales, espacios circenses, espacios alternativos culturales, atelier y galerías de artes, cerrados.
- La imposibilidad de brindar, realizar y producir espectáculos artísticos (funciones), performance, etc., en espacios culturales formales, no formales o alternativos.
- El sector de la música y el circo deben enfrentar las carencias de espacios para poder desarrollar su actividad.
- Artesanos sin poder ejercer su trabajo debido a la falta de protocolos que agilicen su actividad.
- Gestores culturales y productores artísticos sin poder producir debido al contexto de pandemia.
Cultura es un conocimiento y una creación colectiva que producen los sujetos sociales para comprender su realidad, intervenir y transformarla. Es un derecho social inalienable y por lo tanto el Estado es su garante indelegable. A la vez conforma nuestros modos de vivir cotidiano, de percibir el mundo, de indagar y replantear las relaciones humanas, tanto sociales como económicas y políticas en la búsqueda de la construcción colectiva de nuestra identidad y en el marco del pleno respeto de nuestras diversidades. En su sentido más amplio la cultura se considera como el conjunto de rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan a una sociedad o a un grupo social, comprendiendo los derechos fundamentales del ser humano, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias, las letras y las artes.
Así lo establece el artículo primero de la ley provincial de cultura N° 6255 desde el año 2008, lo cual se transforma en respaldo indudable de nuestro reclamo junto con los acuerdos internacionales reconocidos con carácter constitucional en nuestro país a partir de 1994, los cuales protegen la libre creación, pluralidad, circulación, el patrimonio artístico y los espacios culturales.
Desde A.G.A.Ch y quienes adhieren, afirmamos que nuestras fuentes laborales, proyectos y espacios se encuentran en real peligro, cabe destacar que comprendemos y somos conscientes de lo complejo e inesperado de la situación que hoy nos acontece y apoyamos la prioridad sanitaria. En consecuencia pedimos que se tomen medidas extraordinarias y urgentes para declarar la emergencia sanitaria cultural como primera medida, con el mero objetivo de reconstruir las redes socioculturales de nuestra provincia.
Por lo expuesto anteriormente Solicitamos:
- Que la provincia decrete la Emergencia Cultural
- Que se conforme de manera urgente, una mesa de trabajo interdisciplinario, bajo la modalidad presencial y virtual, con al menos 1 (un) representante de cada localidad los cuales al fusionarse deben contemplar a todas las disciplinas.
- Generar un registro único de artistas y disciplinas existentes en la provincia que reconozca a hacedores culturales como trabajadores y se les extienda una credencial de trabajador de la cultura chaqueña.
- Establecer la obligatoriedad a cada municipio de contar con un directorio de sus artistas y disciplinas locales.
- Que se establezcan medidas a largo plazo que den genuino trabajo a hacedores de la cultura provincial
- Que se den respuestas inmediatas a las demandas del sector cultural que se encuentra en emergencia económica y alimentaria
- Módulos de alimentos con criterio de alimentación saludable y completa (verduras, frutas, carne) con opción para personas celíacas.
- Asistencia psicológica de manera opcional y gratuita para el sector cultural artístico
- Que se genere una renta económica para los trabajadores culturales y el sostenimiento de espacios, por el plazo que dure la crisis sanitaria, por un valor de $20.000 a $80.000 mensuales, en tres categorías:
- Individual
- Espacios Culturales
- Grupos o colectivos de arte
- Que el acceso a esta renta económica tenga como requisito excluyente encontrarse registrado en el registro único de artistas provinciales.
- Que el acceso a estos servicios/beneficios no tenga trabas impositivas, que tenga alcance a trabajadores formales e informales de la provincia en su totalidad.
- Otorgar herramientas tecnológicas/digitales (antenas wifi, ruters, etc.) a los espacios culturales, academias y salas de teatro con el fin de agilizar y potenciar la creación de contenidos, funciones, talleres y seminarios vía streaming.
- Establecer la obligatoriedad a municipios y entidades provinciales de habilitar el acceso a espacios culturales públicos oficiales, ya que los mismos cuentan con la infraestructura para realizar ensayos, seminarios, talleres y generar transmisiones online.
- Establecer la obligatoriedad al instituto de cultura y a las secretarias de cultura municipales de la compra de funciones/producciones/contenidos/talleres y seminarios a futuro.
- Establecer conjuntamente los protocolos de sanidad, que permitan a cada sector volver a su actividad, sin trabajas operativas y logísticas.
- Adecuar espacios públicos provinciales o municipales, abiertos o cerrados con el fin de desarrollar actividades culturales.